Para acreditar la existencia de competencia desleal suele ser habitual la falta de acceso a los datos del competidor que acrediten la misma.
La emisión de una pericial en la que, si es preciso, el perito pueda recabar auxilio judicial para obtener la información sirve para poder determinar la existencia o no de dicha competencia desleal y, en su caso, poder determinar el importe a solicitar en concepto tanto de lucro cesante como de daño emergente.
La comprobación usualmente requerirá del análisis de la contabilidad y las declaraciones fiscales (información de la declaración informativa de operaciones con terceras personas mod. 347) para acreditar el trasvase de clientes.
Un dictamen pericial también podrá cuantificar los perjuicios causados y el dinero dejado de ingresar por causa de dicha competencia desleal.